¿QUÉ DEBO HACER SI ME ENCUENTRO
UNA CAMADA DE GATITOS EN LA CALLE?
Estamos ahora en la época en la que las
gatas no esterilizadas acaban de parir y es frecuente que la gente se encuentre
camadas de gatitos en los sitios más insospechados. Si nos encontramos una
camada de gatitos lo primero que tenemos que tener en cuenta es que su madre
por algún motivo los ha puesto allí y que lo más probable es que esté cerca
pendiente de sus cachorros. Si los gatitos están tranquilos significa que hace
poco que han comido y que su madre estará por la zona buscando alimento. En ese
caso lo que debemos hacer es no tocar a los gatitos y esperar un tiempo,
incluso unas horas, para darle a su madre la oportunidad de seguir cuidando de
sus crías. Sin duda el mejor sitio donde pueden estar los gatitos es con su
madre. Si se da el caso de que los gatitos estén en una zona donde corren
peligro o bien si están inquietos y llorando, puede ser que a su madre le haya
pasado algo y en ese caso podríamos considerar coger a los gatitos y llevarlos
a casa. Hay que estar muy seguros de ese paso porque cuidar de forma adecuada a
unos gatitos que todavía no comen solos es una labor muy complicada y requiere
de mucho tiempo cada día. Además ya no habrá vuelta atrás porque si nos
arrepentimos y devolvemos a los gatitos al lugar donde los cogimos
probablemente su madre ya no se ocupará de ellos y les podríamos condenar a una
muerte terrible por frío o inanición. Lo mejor entonces es dejarlos o buscar la
ayuda de alguna organización que tenga los medios adecuados para hacer frente a
estas situaciones. Si decides llevarte a los gatitos a casa tienes que tener en
cuenta algunas cosas muy importantes si quieres que sobrevivan y que crezcan
sanos: 1. No les alimentes con leche de vaca ni con comida casera porque
podrías provocarles una diarrea profusa que podría acabar con su vida. Si
tienen menos de un mes y medio probablemente tengas que darles biberón y lo que
deben tomar es leche especial para gatitos. Si tienen más de un mes a lo mejor
pueden comer ya pienso y también debe ser un pienso especial para gatitos.
Tanto el biberón como la leche o el pienso para gatitos los podéis comprar en
cualquier tienda de alimentación para animales. Si los gatitos tienen menos de
10 días deben tomar biberón cada dos horas. Si son mayores cada tres y a partir
del mes de vida ya se les puede empezar a ofrecer pienso de gatito humedecido,
que tiene que estar siempre a su disposición junto con agua limpia y abundante
para que coman y beban cuando quieran. A partir del mes y medio ya deberían ser
capaces de comer pienso seco con normalidad y se puede ir retirando el biberón.
Hay que asegurarse de lavar bien y hervir el biberón en agua durante 30 minutos
antes de cada uso para evitar intoxicaciones. La leche de gatito debe estar
caliente pero no debe quemar. Lo mejor es probarla en nuestra muñeca antes de
dársela a los gatitos. 2. Los gatitos deben ser estimulados manualmente para
que puedan orinar y defecar. Para ello después de comer debemos darles unos
toques en la zona anal con un trapito o una gasa y esto hará que comiencen a
orinar y defecar profusamente. Hay que procurar no frotar esa zona para evitar
que se les irrite la piel. A partir de las tres semanas de vida ya se les puede
ir poniendo un arenero para que vayan aprendiendo a hacer sus necesidades allí.
Es mejor utilizar arena de gato y no trapos o papel para evitar malos hábitos
en el futuro. 3. Los gatitos por debajo de dos meses de vida tienen
dificultades para controlar su temperatura corporal y tienden a quedarse fríos.
Cuando están con su madre, ella les proporciona el calor que necesitan. Pero
cuando han perdido a su madre es vital ponerles una manta eléctrica o botellas
de agua caliente en su cama para que puedan arrimarse a ellas y recuperar el
calor que vayan perdiendo. Es importante cubrir la manta eléctrica o las
botellas con un trapo para evitar quemaduras y hay que asegurarse de que pueden
alejarse de la fuente de calor si lo necesitan. El frío es una de las
principales causas de enfermedad y muerte de los gatitos que se recogen en la
calle y no es suficiente con tenerles dentro de casa a 20-22 grados. Necesitan
una fuente extra de calor. La forma de saber si tienen frío es porque tienen la
nariz, las orejas o las patitas frías, porque se amontonan unos encima de otros
o porque se ponen a temblar. En ese caso hay que ponerles más calor extra. 4.
Nunca se les debe mojar ni bañar porque puede hacer que cojan frío y se mueran
muy rápidamente. Si se mojan hay que secarlos con el secador cuanto antes con
el selector a bajas revoluciones. También su cama debe mantenerse seca y
limpia, lo que supone cambiar la cama cuando orinen o defequen. Para eso lo más
útil es usar empapadores, que absorben la orina y mantienen la cama más seca.
5. Si los gatitos tienen legañas, dificultad para respirar, diarrea o si están
apáticos o dejan de comer busca la ayuda de tu veterinario lo antes posible.
Cuando los gatitos tengan dos meses de edad y estés considerando adoptarlos o
darles en adopción es importante esterilizarles antes de entregarlos. De esa
forma te aseguras de que no van a contribuir a que haya más gatitos abandonados
en las calles. Ponte en contacto con nosotros o con las asociaciones
protectoras de tu zona para que te podamos ayudar con la esterilización.
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